Ciclos de Vida
En septiembre se celebró la Semana del Anciano. Participé de una actividad con ellos, un programa de imitaciones. Entonces escribí:
Infancia y vejez.
Niños y ancianos…
Se abre y se cierra el ciclo de la vida.
Miro directo a los ojos de aquellos ancianos que participan de los talleres, de los encuentros, del forró, que és un baile popular brasileño.
Hoy me sorprendí con la alegría que irradiaban al participar de las actividades de la “Semana del Anciano”. Presentaciones musicales, bailes, cuentos e historias. Vi lágrimas en los ojos de una señora sentada adelante mío al escuchar los versos de la canción ”Prece ao Vento”, o Plegaria al Viento e imaginaba que recuerdos la emocionaban así:
“… Viento que allá en la orilla de la playa
Escuchaba a mi amor cantar
Hoy estoy solito y tú también
Triste acordándome de mi bien
Viento, dime por favor
Adonde se escondió mi amor…”
En ciertos momentos parecían niños jugando en las plazas y en los patios, entretenidos en las actividades, en una entrega total al momento presente.
Niños que en el ahora y en el presente inmediato tejen sus vidas.
¡Ancianos que la tejen en el ahora, pero cargando en la memoria y en las arrugas las marcas que la existencia dejó!
¡Es posible y necesario envejecer con dignidad y paz!
Real edad
En este tiempo sin tiempo,
en este lugar de suelo duro,
No planté raíces.
Construí un muro
En este suelo de cemento gris
Corren todos para alcanzar el futuro
Los niños intentan vivir el presente
¡No hay tiempo! La prisa de preparar
Para ganarse la vida.
¿Qué vida?
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Silencio para estas preguntas.
¡Aquí no hay tiempo para jugar en la calle
para la poesía, para mirar el cielo y la luna!
Corra.
Aprenda.
Haga.
Copie.
Repita.
Compita.
Compre.
Vea la novela, el fútbol.
¡No pierda tiempo!
No dude.
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