Mario Quintana – Frases I

Publicado por Editor 15 de octubre de 2020

Dios, religión, fe

De los mundos

Dios creó este mundo. El hombre, todavía,

Entró a desconfiar, meditabundo…

De seguro no le gustó mucho de lo que veía…

Y luego fue inventando el otro mundo.

El alma es esa cosa que nos pregunta si el alma existe.

Esos padres conocen más pecados que nosotros…

Pero qué susto no se irán a llevar esas viejas beatas si Dios realmente existe…

No me acomodo con los padres, los críticos y las bombillas de refresco: no hay nada que substituya el sabor de la comunicación directa. ¡¡¡TE AMO…!!! ¡¡¡FELIZ…!!! ¡¡¡TE AMO…!!! ¡¡¡FELIZ…!!! ¡TE AMO!

En el cielo siempre es domingo. Y no tenemos otra cosa para hacer sino oír a los chatos. Y allá todavía es peor que aquí, pues se trata de los chatos de todas las épocas del mundo.

Pregunta equivocada

¿Si yo creo en Dios? ¿Pero qué valor podría tener mi respuesta, afirmativa o no? Lo que importa es saber si Dios cree en mí.

Alguien me dijo, con la voz embargada, que ahora sí estaba convencido de la existencia de Dios, porque los trabajos psicografiados de Humberto de Campos eran evidentemente de él mismo.

– Pero eso no prueba la existencia de Dios… Prueba solamente la existencia de Humberto de Campos.

¡Dejen al Otro Mundo en Paz! ¡El Misterio está Aquí!

El mayor truco ya realizado por el diablo fue convencer al mundo de que él no existe.

En este mundo de tantos espantos,

Llenos de las magias de Dios,

Lo más sobrenatural que existe,

Son los ateos.

 

Belleza, encantamiento

La gran tristeza de los ríos es no poder llevar tu imagen…

La noche encendió las estrellas porque tenía miedo de la propia oscuridad.

¿Dices que la belleza no es nada? Imagina a un hipopótamo con alma de ángel… Sí, él podrá convencer a los otros que es angelical – ¡pero qué trabajo!

La Eterna sorpresa: ¿qué habrá con la luna que siempre que la miramos es con la súbita sorpresa de la primera vez?

Verso suelto: … la luna es la luz del sol que está durmiendo…

Grabado para una chimenea:

en medio de los toros que se desmoronan, cantemos las canción de las llamas, la vida es un incendio: en ella danzamos, salamandras mágicas. ¿Qué importa que resten cenizas si la llama fue bella y alta?

Clair de lune, chiaro de luna, claro de luna, moonlight… jamás los franceses, los italianos, los españoles, los ingleses e americanos sabrán realmente lo que sea la luz de la luna, que nosotros bebemos de un trago en sólo una palabra: luar.

Como un ciego, grita la gente: “¿Felicidad, dónde estás?” O va andando al frente, o quedó para atrás.

Permítase reír y conocer otros corazones. Aprenda a vivir, aprenda a amar a las personas con solidaridad, aprenda a hacer cosas buenas, aprenda a ayudar a los otros, aprenda a vivir su propia vida.

Lo que mata a un jardín no es el abandono. Lo que mata a un jardín es esa mirada de quien por él pasa indiferente… Y es así con la vida, matas los sueños que finges no ver.

Una vida no basta sólo ser vivida, también necesita ser soñada.

Vivir es arrullar sueños y esperanzas, haciendo de la fe nuestra mayor inspiración. Es buscar en las pequeñas cosas, un gran motivo para ser feliz.

Lo bueno de la lluvia es que parece que no tiene fin.

¿Quién puede parar los caminos? ¿Y los ríos cantando y corriendo? ¿Y las hojas al viento? ¿Y los nidos? ¿Y la poesía? La poesía es como un seno naciendo…

En ese día había un azul tan límpido, Dios mío,

que yo me sentía perdonado para siempre.

No sé de qué.

Yo no tengo paredes.

¡¡Sólo tengo Horizontes!!

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